La organización que convocó la tractorada ha lanzado una acusación contundente hacia el delegado del Gobierno al afirmar que este miente al asegurar que existía un pacto previo. Según la organización, lo que realmente ocurrió fue una imposición por parte de las autoridades, dejando en evidencia las discrepancias entre ambas partes. Este nuevo giro en la polémica desvela un trasfondo de desconfianza y desacuerdo, generando un ambiente de tensión en relación a la gestión de la manifestación. La veracidad de los hechos se convierte así en el epicentro de la controversia, alimentando el debate sobre la transparencia y la comunicación entre las partes involucradas en este conflicto.
Organización agraria denuncia: Delegado del Gobierno miente, no hubo pacto
La gran tractorada que tuvo lugar el pasado miércoles 21 de febrero dejó una jornada intensa en las calles de Madrid con el bloque total de la ciudad y muchos momentos de tensión por las cargas policiales contra algunos agricultores, cargas que este jueves ha defendido el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, para para devolver a la normalidad la situación debido a que, dice, los manifestantes quisieron rebasar la línea policial e incumplir el itinerario que estaba planeado por la resolución de la propia Delegación del Gobierno y que, a su vez, estaba confirmado por el Tribunal Superior de Justicia.
Tensión en Madrid por tractorada: Delegado justifica cargas policiales, organización lo desmiente
El delegado del Gobierno miente porque no hubo un pacto sino una imposición, ha afirmado Luis Cortés, coordinador estatal de Unión de Uniones, la organización agraria que convocó la protesta. Cortés ha detallado que el 23 de enero le comunicaron a la delegación del Gobierno el recorrido.
El recorrido estaba aprobado porque tenían 78 horas para contestarnos y no lo hicieron, y el día 19 de febrero, apenas 24 horas antes de la celebración de la manifestación, nos cambian el recorrido, ha denunciado el coordinador de Unión de Uniones.
Y concluye: Nosotros no tenemos nada en contra de las fuerzas de orden público, lo que estamos en contra es de la política dictatorial de este delegado del Gobierno que quería por métodos policiales reprimir a los manifestantes en vez de negociar las posibles soluciones con los agricultores.
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