La sanidad madrileña ha dado un paso revolucionario al implantar un nuevo marcapasos sin cable de última generación que ha sorprendido al sector médico. Esta innovadora tecnología permite a los pacientes recibir el alta hospitalaria en tan solo 24 horas, agilizando considerablemente el proceso de recuperación y reduciendo el tiempo de hospitalización. Este avance supone un gran hito en la cardiología, ofreciendo a los pacientes una alternativa más eficiente y cómoda en el tratamiento de las enfermedades cardíacas. La implementación de este marcapasos sin cables representa un importante avance en el campo de la medicina, marcando un antes y un después en el cuidado de los pacientes con problemas cardíacos.
Implante de marcapasos sin cables en la sanidad madrileña: procedimiento exitoso en 24 horas
Cardiólogos del Hospital Clínico San Carlos, parte de la red sanitaria pública de la Comunidad de Madrid, llevaron a cabo con éxito un implante de marcapasos sin cables de última generación en un paciente que requería con urgencia la sustitución de su dispositivo convencional infectado. Este procedimiento se realizó de forma preferente y sin complicaciones, permitiendo al paciente ser dado de alta a las 24 horas.
El paciente, un varón de 75 años, necesitaba la extracción de su marcapasos convencional por infección, siendo reemplazado por un modelo más avanzado con características que lo hacen más fácilmente extraíble en caso de necesidad y con menor riesgo que los modelos anteriores.
Los marcapasos sin cables se están convirtiendo en una terapia en auge, con aumentos anuales del 25%. Estos dispositivos, implantados directamente en el corazón por vía femoral, reducen significativamente los problemas asociados a los cables de los marcapasos convencionales, como infecciones y roturas que representan un alto riesgo para el paciente en caso de extracción.
Marcapasos de última generación en el Hospital Clínico San Carlos: alta en 24 horas
El Hospital Clínico San Carlos ha apostado por la tecnología más avanzada al optar por la implantación de marcapasos de segunda generación, que ofrecen beneficios como un riesgo mínimo de infección, mayor duración de la batería y la posibilidad de asociar un marcapasos auricular al ventricular si fuera necesario en el futuro.
La implantación de estos marcapasos de última generación forma parte de la línea asistencial del hospital, que busca proporcionar a cada paciente lo que necesita según su estado de salud y circunstancias. Así, se garantiza una atención personalizada y eficaz para cada caso.
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